La Academia de Cine de la Argentina que preside el cineasta Juan Campanella junto al Ministerio de Educación organizó la proyección del film “El estudiante” en el Complejo Cine Village en la ciudad de Rosario. La función con entrada libre y gratuita se desarrolló especialmente para alumnos de 5to año, correspondiente a escuelas secundarias con orientación en ciencias sociales.

La proyección contó con la presencia del director de la película, Santiago Mitre; quien estuvo acompañado por la ministra de Educación provincial, Claudia Balagué; y la coordinadora del área Los Jóvenes y el cine nacional de la Academia de Cine, Roxana Morduchowicz.

La idea fue darles la palabra a los jóvenes y la posibilidad de intercambio de opiniones con el cineasta, quien relató en primera persona sobre su experiencia y la importancia del cine nacional.

Previo a la presentación de la película, Santiago Mitre expresó: “La película es una parábola de la moral en la política y como un pibe va descubriendo la vida del adulto, narra el proceso de maduración y como encuentra su proyecto de vida”.

También, el cineasta relató como descubrió su vocación por el cine: “Empecé hacer cine cuando tenía la edad de ustedes cuando una profesora más o menos delirante se le ocurrió que en vez de hacer trabajos escritos empecemos a filmarlos”. “La película fue bastante exitosa, la vieron 40 mil personas, y en Argentina es mucho para una película independiente” indicó Mitre y aclaró que es su opera prima.

En la oportunidad, Balagué agradeció la presencia del director en la sala, y valoró la actividad que impulsa la academia en pos de la promoción del cine nacional. “Apoyamos estas iniciativas porque fortalece la cultura en general de grandes y chicos, y se suma a otras iniciativas que lanzamos este año para la escuela secundaria, como las olimpiadas santafesinas no solo de deporte sino también artísticas; la de educación sexual integral, también estamos trabajando en voto joven, y en el programa Vuelvo a Estudiar para los chicos que hoy no están acá y queremos rescatar”, detalló la titular de la cartera provincial.

La función contó con el apoyo de la empresa Nokia y del Ministerio de Educación provincial, quien realizó la convocatoria entre las escuelas del nivel secundario. El objetivo de la actividad, según explicó la coordinadora del área Los jóvenes y el cine nacional de la Academia de Cine, Roxana Morduchowicz, es "fortalecer el vínculo entre los jóvenes y el cine nacional. Sabemos -dijo Morduchowicz- que los jóvenes disfrutan el cine. Lo que queremos es que incluyan al cine argentino entre sus elecciones".

Entre los chicos que asistieron a la función hubo opiniones variadas sobre el cine nacional. Facundo, del Complejo Gurruchaga expresó: “Cada tanto miro una película de cine nacional, me gusta porque la mayoría son de suspenso y policiales. Me gustó “Nueve Reinas”, “El secreto de sus Ojos”, y también ví “Cuento Chino”.

Luisa, del Normal N°2, manifestó: “El cine argentino está cada vez mejor, los actores, los directores son muy buenos, y hacen las películas cada vez más entretenidas. Y el secreto de sus ojos me encantó”.

Con respecto a la posibilidad de conocer al director del film, Nicolás opinó: “Me parece buena la idea de poder discutir que interpretamos cada uno de la película y que quiso en realidad decir el director o que quiso hacer que interpretemos”.

La trama Roque Espinosa (Esteban Lamothe) es un joven de Ameghino, un pueblo de la provincia de Buenos Aires, que llega a la ciudad para estudiar en la Universidad de Buenos Aires (UBA). Esta vez es en la Facultad de Ciencias Sociales y en su tercer intento, luego de abandonar otras dos carreras. Sin embargo Roque parece más interesado en hacer amigos y conocer mujeres que en enfocarse en graduarse.

Conoce a Valeria (Valeria Correa) y a los pocos días se muda a su casa, luego se interesa por Paula (Romina Paula), y la sigue hasta que se ponen de novios. Ella, una profesora adjunta comprometida en la política de la universidad, lo introduce al mundillo de la militancia. Y así Roque, que a simple vista no entiende y parece ese simple provinciano al que los porteños tienen estereotipado, resulta ser un experto en fingir y lograr lo que quiere.

Parco, pragmático y a su vez simpático, conoce a Alberto Acevedo (Ricardo Félix), un viejo político que aspira al rectorado de la universidad y aún más. Roque aprenderá los códigos, traiciones, manejos y favores de la política, y por sobre todas las cosas descubrirá que justamente política —y no el estudio— es lo mejor que sabe hacer.

El director Santiago Mitre nació en Buenos aires en 1980. Se formó en la época en que el nuevo cine argentino surgía con películas como Pizza, birra y faso (1998, Adrián Caetano), Mundo grúa (1999, Pablo Trapero) y La ciénaga (2001, Lucrecia Martel), y ese espíritu de cine fundamental con escasos recursos es el que Mitre parece rescatar. Fue uno de los cuatro directores de El amor (1era parte) (2004) y co-guionista de Leonera (2008, Pablo Trapero) y Carancho (2010, Pablo Trapero). Con esta ópera, Mitre obtuvo premios en el Festival de BAFICI; en el Festival de Lleida; Valdivia, Gijón y Cartagena.