“Es muy importante que el programa se extienda territorialmente en toda la provincia. Ya son 2300 las viviendas resguardadas con esta herramienta jurídica”, señaló el secretario de Gestión Pública, Matías Figueroa Escauriza.
Además, agregó que la afectación como bien de familia “no es solo un trámite burocrático” sino que representa “una instancia valiosa para proteger los hogares de los santafesinos en momentos de crisis económica como los que actualmente atraviesa el país”.
El programa se planteó desde sus comienzos, en diciembre de 2016, llegar a las cinco regiones en las que está dividida la provincia. A esos fines se han firmado decenas de convenios con comunas y municipalidades de modo que a través de los gobiernos locales, los vecinos se puedan inscribir y solicitar la nueva escritura de su casa.
Gracias a este trabajo de coordinación, el Registro de la Propiedad procesa permanentemente nuevos requerimientos, “lo cual tiene que ver con una cuestión de accesibilidad de derechos”, subrayó el secretario de Gestión Pública.
PRESENTES
En el acto que tuvo lugar en el salón del Bicentenario de la ciudad de Las Parejas, estuvieron el coordinador del programa Protegé tu casa, Enzo Ricci; el intendente local, Horacio Compagnucci; el senador departamental Guillermo Cornaglia; y la presidenta del Concejo Municipal, Sandra Clérici, junto con vecinos que recibieron las escrituras.
PROTEGER LA VIVIENDA
La afectación es una protección jurídica destinada a resguardar el asiento de la familia frente a las adversidades económicas. Mediante un acto administrativo gratuito, se accede a este derecho, lo que evita que la propiedad pueda ser ejecutada por deudas posteriores a la afectación.
En caso de embargo o hipoteca, es posible proteger la vivienda para futuras deudas, pero las contraídas con anterioridad sí pueden atacar al inmueble. El trámite es sencillo y las entregas se realizan en cada localidad, en actos colectivos y públicos.
Pueden ser beneficiarios la/s persona/s propietaria/s afectante/s en su propio beneficio; cónyuge, conviviente, ascendientes (padres, abuelos), descendientes (hijos, nietos) y, a falta de los anteriores mencionados, pueden designar a sus parientes colaterales de hasta tercer grado con la obligación de que convivan en el inmueble protegido (hermanos, sobrinos, tíos).
