El encuentro se llevó a cabo en salón Auditorio de la mencionada institución ubicada en San Lorenzo 1849, del que participó más de un centenar y medio de funcionarios y empleados de las áreas de control de la administración centralizada, descentralizada, organismos autárquicos y empresas del Estado santafesino.
Luego de agradecer a los organizadores, Farías definió que al control interno “hay que asumirlo como tal. Parece -dijo- una cuestión casi obvia o evidente, pero es importante asumirlo como control y que ejerza esa función. No pensar solamente en una faz que es la colaboración en una gestión, en ayudar que una gestión se realice lo más ordenada y prolija posible de acuerdo a la normativa, sino también ejercer esa función en el momento en que los actos administrativos se están preparando y desarrollando en la gestión pública”.
ESPACIOS DE REFLEXIÓN
El ministro añadió “la necesidad de generar espacios y momentos de reflexión sobre los actos administrativos en forma permanente, más allá de las dificultades que implica la estructura normativa y cualquier intento de modificación en cuanto a la profundidad que tiene que tener el análisis y el trabajo de cada norma de la gestión y la administración del Estado”.
Puntualizó también que “naturalmente se incorporan herramientas que hacen a la modernización del Estado, una gestión de cercanía al ciudadano, que respondan con rapidez a los temas en cuanto a las necesidades. Eso implica -reflexionó- que permanentemente se revise la normativa para hacerla más eficiente y eficaz, y que los procedimientos siempre respeten los principios de transparencia y competencia en las contrataciones, y la posibilidad de tener permanentemente instancias de control interno”, insistió.
CUMPLIMENTO ESTRICTO Y TRANSPARENCIA
Farías aludió también “a la correcta relación entre el funcionario político y el control” y explicó que en general se posee una “vocación de gestionar lo más adecuada y rápidamente posible y muchas veces chocamos contra las áreas de control o con las mismas áreas administrativas cuando se exige algo absolutamente lógico y razonable como el cumplimiento estricto de una norma”.
“Allí hay que lograr un equilibrio -continuó- y trabajarlo juntos entre entender una necesidad determinada, entender la tensión de la demanda o de lo que está surgiendo coyunturalmente en el momento, que muchas veces exige creatividad, esfuerzo y sobre todo mucha voluntad para encontrar la mejor salida”.
El titular de la cartera de Gobierno santafesina resumió que desde la gestión provincial “se tiene en claro la necesidad del cumplimiento estricto de la normativa de la administración pública del Estado” y que también “se está trabajando en la modernización y transformación de las normas para tener una administración más ágil y adecuada a los tiempos que corren. Nos interesa mucho darle la mayor transparencia posible a los actos públicos”, sintetizó. Atento a ello, recordó la reciente presentación del gobernador Miguel Lifschitz ante la Legislatura provincial del proyecto de Ley de Acceso a la Información Pública para su sanción definitiva.
PRESENTES
Estuvieron, además, el síndico General, Emiliano Arzuaga; el director provincial de Control, Carlos Peña; el gerente de Coordinación General, Néstor Dona; el presidente del Consejo Profesional de Ciencias Económicas, Dante Musuruana; el presidente del Honorable Tribunal de Cuentas de la Provincia de Santa Fe, Oscar Biagioni; la síndica general de la municipalidad de la ciudad de Santa Fe, Andrea Arrietti; y el auditor interno de la Unidad de Auditoría Interna de la Universidad Nacional del Litoral, Darío Mejías, entre otras autoridades.
