Miércoles 25 de marzo de 2015
El gobernador Antonio Bonfatti abogó por el “federalismo” al encabezar en la capital santafesina el acto por el bicentenario de la autonomía de la provincia de Santa Fe, que se conmemoró este 24 de marzo. La ceremonia tuvo lugar en el Convento de San Francisco, situado a una cuadra de la Casa de Gobierno, en el casco histórico de la ciudad. Allí yacen los restos de Francisco Candioti, quien en 1815 fue elegido como primer gobernador de la provincia.“Han pasado 200 años y desde el interior seguimos reclamando por el federalismo planteado ya desde aquel el 24 de marzo de 1815. El interior sigue aportando mucho a Buenos Aires y en alguna medida hoy ese federalismo no está vigente”, sostuvo Bonfatti.
En ese marco, señaló que “Santa Fe siempre luchó para consolidar el interior, que nos dio una Bandera, que nos dio el primer Estatuto en 1819 y, finalmente, la Constitución de 1853”.
“Esta provincia es tan rica en historia”, afirmó el gobernador, al tiempo que remarcó “el convencimiento de nuestros antepasados sobre la necesidad de defender la libertad proclamada en 1810, y la determinación de estos pueblos artiguistas de tener una Constitución, inclusive, con algunas cuestiones sociales ya planteadas”.
Bonfatti también rescató la figura de Candioti, “ese hombre que se puso al frente en la confrontación entre el trabajo del interior y el centralismo porteño y de la Aduana de Buenos Aires”, según indicó. “Finalmente el 24 de marzo de 1815 pudo demostrar que su planteo de autonomía era real: el 2 de abril asumió como el primer gobernador autónomo, en un proceso que terminó de consolidarse el 26 de ese mes”, añadió.
Junto con el gobernador estuvieron presentes el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Rubén Galassi; el presidente de la Corte Suprema de Justicia provincial, Roberto Falistoco; el vicario del Convento de Santo Domingo, Diego Correa; autoridades provinciales, militares y de fuerzas de Seguridad; miembros de la Junta Provincial de Estudios Históricos de Santa Fe; familiares de Francisco Candioti; y abanderados, docentes y alumnos de distintas escuelas de la ciudad.
GENERAR CONCIENCIA
El gobernador resaltó “el trabajo de la Junta Provincial de Estudios Históricos, necesario para seguir generando conciencia, no sólo sobre el valor y el patrimonio de nuestra historia, sino del aporte de Santa Fe a la construcción de este país”.
Previamente, habló en nombre de la Junta Provincial de Asuntos Históricos, Ana María Cecchini de Dallo, quien explicó “hace 200 años arribaron a Santa Fe las tropas conducidas por Manuel Artigas, hermano de José Gervasio de Artigas, el protector de los pueblos libres”.
La historiadora indicó que las fuerzas orientales vinieron a Santa Fe, que “reclamaba ser gobernada por santafesinos elegidos por su propio pueblo”, es decir, “la condición de ejercer su autonomía”.
Las fuerzas orientales, según dijo Cecchini de Dallo, desplazaron “de inmediato al ejército regular de las Provincias del Río de la Plata, que había sido formado para ayudar a la guerra de la independencia pero que los gobiernos de Buenos Aires utilizaban para ocupar y combatir a los mismos pueblos rioplatenses que no se subordinaban al poder de la dirigencia porteña”.
ACERCA EL PRIMER GOBERNADOR
Respecto de Candioti, la investigadora manifestó en primer término que “fue un hombre de trabajo que, sobre una herencia menor y en base a su esfuerzo personal, fue desarrollando un importante circuito comercial y empresarial”.
“La decadencia comercial portuaria de Santa Fe fue suplida parcialmente en el siglo XVIII mediante el comercio de las mulas con el Alto Perú, donde Candioti aparece como figura fundamental”, añadió.
“En 1815, tras el arribo de las tropas orientales, el gobierno quedó en manos del Cabildo, expresión institucional de la soberanía de los santafesinos. Candioti fue elegido por ese Cabildo gobernador-intendente interinamente –explicó Cecchini-, y se le encargaron todos los ramos del gobierno, con las facultades necesarias para ejercerlos hasta la realización del congreso federal del pueblo santafesino”, relató.
EL ACTO
En primer término, se entonaron las estrofas del Himno Nacional y luego se depositaron ofrendas florales en la tumba de Candioti, ubicada en el piso, frente a la nave central de la iglesia, a cargo del gobernador junto con el presidente de la Corte Suprema y el ministro de Gobierno; y miembros de la Junta Provincial de Estudios Históricos y de la Asociación Cultural Sanmartiniana.
Seguidamente, se ejecutó un toque de silencio a cuyo término realizó una invocación religiosa el vicario del Convento, quien recordó, además, que el propio Candioti solicitó ser sepultado en el templo y que su hijo se ordenó sacerdote en la orden dominica.