La ministra de Educación, Claudia Balagué, realizó este martes un balance de la misión educativa a Finlandia, llevada a cabo en la semana del 24 de septiembre en la que remarcó que la educación en el país nórdico se caracteriza por la rigurosidad en la formación docente, la interdisciplina, las materias transversales y los espacios educativos flexibles.

La titular de la cartera educativa estuvo acompañada por integrantes de la comitiva que viajó a Finlandia: Silvia Morelli, directora provincial de Desarrollo Curricular y Relaciones Académica; y las dos directoras que están haciendo la maestría y que formaron parte de la comitiva: Patricia Cafaro, de la Escuela Nº 1110 “Simón de Iriondo” de Santo Tomé, y Alejandrina Giovagnoli, de la Escuela Técnico Profesional 692 de Cañada de Gómez.

“Queríamos hacer una evaluación de la Maestría que la estamos haciendo desde 2015 con sede en la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y mediante un convenio con la universidad finlandesa de Támpere. En particular, analizar los proyectos de tesis final que están elaborando los 60 directores que la están cursando la etapa final, fundamentalmente para que cuenten cómo aplican estas experiencias en sus propias escuelas”, dijo la ministra.

DOCENTES FINLANDECES

Balagué destacó que en el itinerario “visitamos una escuela de formación docente, una primaria y otra secundaria, donde vimos también los espacios educativos flexibles, las materias transversales y el trabajo en interdisciplina, que aquí en Santa Fe desarrollamos a través de los NICs”.

La titular de la cartera educativa explicó que luego visitaron la Universidad de Helsinski, a la que calificó como “la más importante y antigua de Finlandia. Allí también pudimos hacer un convenio de colaboración estrictamente sobre la formación docente; estamos trabajando con profesores reconocidos como Jari Lavonen”.

Ante una consulta periodística, resaltó que “una de las características de la educación en Finlandia es fundamentalmente la formación docente, que tiene una rigurosidad muy importante; casi nadie puede acceder a un cargo docente si no tiene un posgrado o maestría”.

“Materias que nosotros veíamos quizá más simples, como Economía Doméstica, hay una maestría para darla. A los chicos se les enseña, por ejemplo, a cocinar, planchar, trabajar de manera independiente en su vida cotidiana. Ahí donde se les enseña Comida Española, se dan contenidos de historia, geografía, cultura de ese país. Por eso tiene esa formación tan intensa, porque no es una sola asignatura sino que engloba a varias”.

RECORRIDA

La comitiva se desplazó también a Vaasa, donde visitó la Abo Akademi, una universidad de origen sueco que está desarrollando su práctica educativa con varias sedes en Finlandia. “Allí participamos de un seminario internacional con representantes de varios países y nosotros, de la provincia de Santa Fe, analizando y compartiendo sobre políticas públicas educativas”, dijo la ministra.

Finalmente, la misión llegó hasta la Universidad de Turku, donde se abordó el método antibullying KiVa. “Hicimos un primer acuerdo de compartir experiencias entre los formadores de ese método y nuestros equipos ministeriales del programa Lazos, de prevención de violencia, para profundizar el trabajo antibullying en Santa Fe. Creemos que con este método ya probado y especializado podremos hacer un nuevo aporte a las escuelas santafesinas, sobre todo en aquellas donde hubo casos resonantes”, amplió Balagué.

EXPERIENCIAS PROPIAS

La directora Alejandrina Giovagnoli, una de las 60 docentes que se encuentran realizando la Maestría en Políticas Públicas para la Educación contó a los medios periodísticos que “para nosotros esta maestría fue un antes y un después, porque nos permitió repensar nuestra propia gestión, nuestro rol y, a partir de allí, generar algunas estrategias de cambios hacia los docentes y, a través de ellos, hacia los estudiantes que son lo más importante que tenemos en las instituciones”.

“Nosotros tenemos poblaciones de estudiantes particulares, por lo tanto, la teoría de la narrativa que planteó el profesor finlandés Eero Ropo fue muy importante. Poder distanciarnos un poquito y pensar en ese estudiante que necesita ser escuchado”, dijo la directora de Cañada de Gómez, que ya aplica algunos de sus conocimientos de posgrado a su escuela técnica.

En tanto, Patricia Cafaro, directora de la ciudad de Santo Tomé destacó: “Todos los aspectos que se intentan trabajar en educación son vistos por ellos como procesos muy largos y complejos; y hacen una apuesta al trabajo compartido -y no en soledad- del docente. Un trabajo que se encara de a dos maestros, con planificación compartida y mucha construcción del conocimiento”.

La ministra Balagué remarcó que desde Santa Fe nunca se pensó en “extrapolar” las experiencias de enseñanza finlandesas. “Lo que nosotros tomamos fundamentalmente es esa rigurosidad en la formación docente de Finlandia; creemos que nuestros propios directores estén haciendo ya posgrados gratuitos, ofrecidos por el propio Ministerio de Educación con universidades locales, de alguna manera refuerza esa formación que para nosotros es importante”.

La misión fue organizada por la coordinación de Relaciones Internacionales de Educación y la secretaría de Relaciones Internacionales del gobierno provincial, y financiada por el Consejo Federal de Inversiones (CFI).