Las escuelas primaria N° 13 y secundaria N° 1311, cuyos anexos funcionan en el Instituto de Recuperación del Adolescente de Rosario celebraron el cierre del año lectivo con la entrega de diplomas, exposición de trabajos realizados y un número de malabares y acrobacia entre alumnos, docentes y familiares.

“Este momento es el reflejo del compromiso que tenemos por garantizar los derechos y profundizar el fortalecimiento de la igualdad de oportunidades borrando los muros y los asumimos como portadores de sueños para que estos jóvenes en conflicto con la ley, se animen al desafío que les plantea el encuentro con la cultura, sintiéndose capaces de recorrer nuevos caminos con la convicción de que la educación les ha dado las alas para volar en búsqueda de nuevos horizontes”, descató la directora provincial de Educación para Adultos, Noemí stara.

“Siempre trabajamos para que los chicos piensen en libertad aun estando en situación de encierro”, dijo la directora de la Escuela Primaria N° 13, Karina. “Participamos de muchos proyectos y programas este año:Bandera del Amor, Convivencia junto al Ministerio de Justicia, Olimpiadas de Matemáticas, Educación Sexual Integral, entre muchos otros, y recientemente nos comunicaron que sacamos el 2do puesto del concurso audiovisual Convivencia Sin Violencia de Kapelusz Editora”, detalló y consideró: “Realmente una cantidad de actividades que los alumnos pudieron vivenciar y que hicieron que tengan las mismas posibilidades que el resto, traspasando los muros”.

“Son pequeños grandes logros como lo es asistir a la escuela secundaria, que quiere continuar cuando esté en libertad”, cuenta Carmen, más de uno de los jóvenes que participaba del acto. “Veo que ahora tiene muchos proyectos que antes no tenía, me siento orgullosa del diploma que mi hijo recibió hoy, porque esto demuestra que existe un futuro distinto para ellos”, agregó y reflexionó: “No hay que olvidar que son chicos que por las distintas circunstancias de la vida han tenido que crecer de golpe”.

“Estoy contenta de que acá Luciano pudo retomar los estudios y terminar la primaria, y como abanderado, algo impensado”, dijo otra mamá. “Me eligieron como abanderado por la buena asistencia y por la buena conducta, estoy muy contento”, agregó Luciano, con su diploma de primaria finalizada en mano.